Seguidores

miércoles, 13 de julio de 2011

Blogger intermitente.







Una blogger intermitente. Así es como se me puede definir estas últimas semanas. Aparezco y desaparezco. Pero es que ya sabéis que soy como un terremoto incapaz de parar, y más a ahora que el verano nos rodea.
He estado unos días con esta chica tan guapa que podéis ver en las fotos. Han sido unos días fantásticos. También he estado tres días con mi chico. Me hacía mucha falta. Últimamente entre unas cosas y otras no teníamos ni uno sólo momento para nosotros. Así que decidimos olvidarnos del mundo aunque fuera tan sólo por tres cortísimos días. Sí, cortísimos. Porque como ya sabéis, cuando se está en buena compañía, el tiempo pasa fugaz.
Hace un par de semanas acabaron las clases de italiano. He quedado tan encantada que ya me he inscrito para el curso que viene. Mañana dejo de dar las clases de baile a los pequeñajos. Me han dicho que después de verano seguiré pudiendo trabajar. Es otra gran noticia.
Tengo unas ganas enormes de hacer alguna entrada especial. Estos días que voy a estar más relajada y con más tiempo me voy a dedicarme bastante al blog. Subiré algún que otro texto mío y actualizaré más a menudo. Estoy planeando hacer cada cierto tiempo una entrada especial. Es una idea que todavía está madurando dentro de mi cabeza. No me gustan las entradas monótonas. Ya veréis como pronto se me ocurre algo nuevo que le de un aire fresco a este blog.


Muchísimas gracias a esas personitas especiales que dejan día a día comentarios en mis entradas y a los nuevos seguidores que van haciendo que esto sea cada día más y más grande. Un besito enorme para todos vosotros.

martes, 5 de julio de 2011

Miss Maac ha vuelto.










Un helado de chocolate en Roma. Un paseo en góndola por los canales de Venecia. Una noche de locuras en una discoteca de Siena. Un par de trozos de pizza gigantes deborados con ansia tras un largo día. Quedarse sin respiración al contemplar Florencia desde las alturas. Siestas cortas pero intensas en el autobús. Un candado con tu nombre y el mio en el puente Milvio. Amaneceres vistos desde la proa de un barco. Encuentros con gente nueva que dejan huella. Echar de menos a la persona que amas. Noches enteras sin dormir, con cotilleos, risas y alguna que otra anécdota divertida. Cadenas de bostezos mañaneros. Una triste despedida de personas conocidas durante el viaje que jamás olvidarás. Un camino de vuelta repleto de lloros y medias sonrisas. Cientos de fotos que guardan cada uno de los momentos vividos. Un Ipod para dos a toda pastilla. Sesenta y tres canciones italianas que se reproducen aleatoriamente en un autobús con destino a Milán. Una cámara que dispara cien fotos por minuto. Miles de imágenes grabadas en la retina. Filippa, una mujer que en un par de momentos logró enseñarme lo importante que puede llegar a ser el amor. Un trío de camareros de un restaurante en la Toscana que impresionan. Un lugar que nos deja marcados y con ganas de más.


PD: Sí, bloggers. He vuelto. He decidido contaros mi viaje a Italia a través de momentos. Pero esto no acaba aquí. Iré subiendo más fotos y contando cositas de Italia. Esta noche responderé vuestros comentarios. Tenía ganas de volver por aquí. Un besito grande.